Cómo proteger su propiedad intelectual a escala internacional

Un enfoque estratégico para la protección mundial de la PI

Mientras ordenaba mi bandeja de entrada, me encontré con un antiguo correo electrónico que había enviado a un cliente español que había contratado a nuestro bufete de abogados para salvaguardar su propiedad intelectual en todo el mundo. El siguiente texto procede de nuestro correo electrónico inicial, en el que explicábamos lo que proponíamos hacer para proteger la propiedad intelectual de esta empresa en todo el mundo.

  1. Determinar dónde registrar su propiedad intelectual: probablemente querrá obtener marcas para sus marcas, logotipos y algunos o todos los nombres de sus productos en todos los países en los que se fabriquen o vendan sus productos, o en los que tenga operaciones comerciales importantes. Para ello, es importante que piense en el futuro. ¿Tiene previsto entrar en algún mercado en un futuro próximo? Asegurar ahora sus derechos de PI para esos países será probablemente una buena idea.
  2. Priorización de sus activos de PI: Juntos debemos evaluar qué elementos de su PI merecen la pena. Para nosotros, como abogados, es fácil sugerirle que obtenga registros de toda su propiedad intelectual, pero si tiene un producto que genera 15.000 dólares de ventas anuales en Vietnam, probablemente podamos pasar por alto ese país, a menos que tenga previsto hacer algo allí que probablemente aumente sus ventas. Pero ahora mismo, probablemente no merezca la pena dedicar tiempo y dinero a intentar proteger 15.000 dólares de ventas anuales, sobre todo porque cuanto menores sean sus ventas en un país determinado, menor será el riesgo de que alguien robe su PI en ese país.
  3. Mecanismos de protección: Esto suele implicar el registro de marcas, derechos de autor o patentes. Una empresa de bebidas estadounidense, por ejemplo, registró una marca por el diseño exclusivo de su botella y patentó su proceso de filtración patentado, con lo que se aseguró dos niveles de protección.
  4. Contratación estratégica: Los contratos pueden proporcionar salvaguardias adicionales en materia de propiedad intelectual. Considere los acuerdos de licencia, los acuerdos sobre secretos comerciales, los acuerdos NNN (no divulgación, no uso, no elusión), los acuerdos de confidencialidad y las cláusulas de no competencia. Un ejemplo de ello es un acuerdo de licencia que redactamos para un cliente con un socio europeo, que incluía cláusulas específicas sobre el uso de la PI y las sanciones por infracción.

Medios no jurídicos para reforzar la protección de la PI

  1. Mantener las tecnologías clave localmente: Mantener sus tecnologías y procedimientos críticos dentro de su país de origen, en la medida de lo posible, puede limitar la exposición. Una bodega española a la que asesoramos mantuvo su exclusivo proceso de fermentación en secreto dentro de sus propias instalaciones.
  2. Limitar el acceso a información sensible: Restringe la información clave a un círculo reducido de personas de confianza. Piense en ello como la filosofía de "menos es más" en la difusión de información.
  3. Diseño de productos resistentes a la copia: El diseño ingenioso de productos puede disuadir de la copia. Un cliente del sector de la electrónica diseñó sus productos con componentes personalizados difíciles de replicar, lo que añadió una capa de protección contra la imitación.
  4. Compartimentar la producción: Al distribuir las distintas fases de producción entre varias entidades, se reduce el riesgo de que un solo fabricante adquiera un know-how completo. Este enfoque fue utilizado eficazmente por un cliente que fabricaba piezas especializadas para automóviles.
  5. Externalización diversificada: Subcontrate diferentes componentes a varias empresas. Así se minimiza el riesgo de que un único proveedor se convierta en competidor.
  6. Rigurosos procesos de contratación: Investigue a fondo a los empleados y socios comerciales en todo el mundo. Asegúrese de que firman acuerdos de confidencialidad y de no competencia. Una empresa tecnológica a la que asesoramos aplicó rigurosas comprobaciones de antecedentes y estipulaciones contractuales a todas sus contrataciones internacionales.
  7. Realizar una investigación diligente de proveedores y distribuidores: Seleccionar socios con una reputación propia que proteger. Incluya cláusulas de protección de la propiedad intelectual en los contratos. Por ejemplo, un cliente del sector cosmético solo se asoció con proveedores que tuvieran un historial demostrado de respeto de los derechos de PI.
  8. Vigilancia del panorama de la PI: Vigile las actividades de propiedad intelectual de sus competidores para evitar imitadores. La implantación de un sistema de seguimiento de las solicitudes de registro de marcas, por ejemplo, puede ser muy valiosa.
  9. Haga valer sus derechos: Vigile de cerca las violaciones de los derechos de propiedad intelectual y actúe con rapidez. La solidez de sus derechos de PI depende de su compromiso para hacerlos valer.

Reunirlo todo:

Asegurar su configuración jurídica y operativa es esencial, pero es sólo el principio. La gestión proactiva de la propiedad intelectual es un proceso continuo de movimientos y contra-movimientos estratégicos. Las protecciones legales son cruciales, pero la integración de estrategias no legales en su arsenal puede reforzar significativamente su defensa general de la PI.

Aunque establecer un marco jurídico y operativo sólido es esencial para salvaguardar su propiedad intelectual, es sólo el principio de lo que debería ser un proceso dinámico. A medida que se aventura en nuevos mercados y desarrolla productos o servicios innovadores, debe reevaluar y fortalecer continuamente sus estrategias de propiedad intelectual. Proteger su propiedad intelectual no es sólo cuestión de batallas legales y papeleo; es cuestión de cultivar las innovaciones e ideas fundamentales que dan a su empresa su ventaja competitiva.

Los matices de la protección de la PI trascienden las fronteras. Es crucial mantenerse informado sobre las leyes internacionales de PI y las leyes de los países en los que opera y compra sus productos, y adaptar sus estrategias de PI en consecuencia. Recurra a expertos, aproveche las nuevas herramientas y tecnologías para vigilar las violaciones de la propiedad intelectual y cultive en su organización una cultura que valore y proteja la creatividad intelectual.

Al integrar medidas legales y no legales en una estrategia cohesionada, no sólo se posiciona para defender sus activos de propiedad intelectual actuales, sino que también allana el camino para que prosperen las innovaciones futuras. Cuando se trata de propiedad intelectual, más vale prevenir que curar. Sea proactivo, manténgase informado y siga desarrollando su estrategia para adaptarla a su situación actual de propiedad intelectual.

Es evidente que poner orden en los aspectos jurídicos y operativos no evitará todos los problemas de propiedad intelectual, pero es un comienzo necesario.