A principios del mes pasado, la Cámara de Representantes de Estados Unidos aprobó un proyecto de ley que obligaría a ByteDance, la empresa matriz de TikTok, a vender su participación en la aplicación de medios sociales o a prohibirla. Detrás de la medida, está la preocupación del Gobierno de EE.UU. de que las conexiones del propietario de TikTok con China supongan una amenaza para la seguridad nacional, que si no se controla podría poner los datos de sus usuarios estadounidenses en manos de un adversario aceptado. Afirman que la aplicación podría utilizarse para espiar a los estadounidenses o como arma para influir en ellos. Apuntan a una ley china que obliga a las empresas a entregar datos personales si los solicita el gobierno.
Sin embargo, apenas hay pruebas de que esto haya ocurrido, y la legislación parece basarse en el miedo y el desprecio general hacia China, más que en datos empíricos. Si se aprueba en el Senado y se convierte en ley, no hará sino enfurecer a China y provocar nuevas represalias contra las empresas estadounidenses.
Represalias y descontento público en China
Ejemplos de este tipo de represalias son el reciente anuncio de China de que está aplicando nuevas directrices para eliminar la tecnología estadounidense de sus ordenadores gubernamentales, lo que supondría la prohibición, al menos parcial, de los microprocesadores de Intel y AMD. También han respondido a otras acciones de Estados Unidos aplicando normativas de exportación de minerales de tierras raras, bloqueando fusiones en las que participa una empresa estadounidense de semiconductores y prohibiendo la compra de chips Micron para su uso en las infraestructuras chinas por motivos de ciberseguridad.
Las represalias de China son sólo una de las preocupaciones que rodean la posible prohibición. Otra es el enfado de los usuarios estadounidenses. Actualmente, se calcula que hay más de ciento setenta millones de usuarios de TikTok sólo en Estados Unidos. La aplicación ofrece una plataforma para crear y difundir contenidos con un alcance nunca visto. En caso de prohibición, esta gran franja de usuarios estadounidenses, incluidas las empresas y los creadores de contenidos, se verían inmediatamente privados de sus derechos. El público perdería una importante herramienta para la libertad de expresión y el intercambio de ideas. Una medida sin precedentes.
Respuesta de TikTok
Para contrarrestar las preocupaciones de los legisladores, la aplicación ha afirmado que ya ha tomado medidas voluntarias sin precedentes para ofrecer una experiencia segura a los usuarios estadounidenses, canalizando el código fuente utilizado para impulsar su algoritmo a través de la empresa estadounidense Oracle. ¿Será suficiente para evitar la prohibición? Probablemente no. Por ello, TikTok también se ha puesto en contacto con sus usuarios a través de la aplicación para animarles a llamar a sus representantes e indicarles su oposición a la medida.
Situación actual del proyecto de ley
El Senado está a punto de retomar el proyecto de ley, aunque no está claro cuándo, y parece haberse estancado. El Presidente Biden ya ha dicho que firmaría la ley si se aprobara en la Cámara Alta. Actualmente se encuentra en la Comisión de Comercio del Senado, que estudia la posibilidad de celebrar una audiencia sobre el asunto. No está claro si el Comité sopesará los problemas que plantea la Primera Enmienda a la hora de prohibir una plataforma de libertad de expresión, o si dejará estos problemas en manos de los tribunales.
Batallas legales
Todo indica que TikTok presentaría una batalla legal de este tipo en caso de que el proyecto se convirtiera en ley. De hecho, el año pasado Montanna aprobó una prohibición similar. Esa ley fue impugnada en los tribunales y bloqueada temporalmente por un juez federal que declaró que la prohibición era inconstitucional. El juez Donald Molloy dijo que los intentos dentro de Montana de bloquear la aplicación representaban un "omnipresente trasfondo de sentimiento antichino." Anteriormente, las acciones del entonces presidente Trump para eliminar la app en EE.UU. también fueron bloqueadas por múltiples jueces en tribunales federales.
Venta forzosa
La otra posibilidad para ByteDance en caso de que el proyecto se convierta en ley es vender la aplicación en un plazo de 180 días. Sin embargo, la venta plantea importantes retos, como encontrar un comprador que pueda permitirse el multimillonario precio. China también tendría que aprobar la venta, y ya ha indicado que no la apoyaría. El consejero delegado de TikTok ha indicado que es inviable que se produzca una venta de este tipo, y que la aprobación del proyecto de ley sólo provocaría la prohibición de la aplicación en Estados Unidos.
Impacto en las empresas
Una prohibición de este tipo afectaría sin duda a las empresas locales que dependen de la aplicación para llegar a más consumidores y vender sus productos. Los más de siete millones de pequeñas y medianas empresas de la plataforma se verían muy afectadas por la pérdida de ingresos y marketing de TikTok, aunque no son las únicas. Las grandes marcas también han confiado en TikTok para llegar a los consumidores más jóvenes, como Sephora, Walmart y Target. La publicidad en TikTok es más asequible en comparación con otras empresas como Google y Meta, y una prohibición obligaría a las marcas a reajustar sus estrategias de marketing, diversificar su alcance y participar en plataformas más caras.
Los defensores del proyecto de ley dicen que es una oportunidad para regular la industria tecnológica después de años de inacción por parte del Congreso en asuntos que incluyen la protección de los niños, la privacidad de los usuarios y la regulación de la inteligencia artificial. El proyecto de ley se enfrenta a la oposición de algunos senadores, entre ellos el senador por Kentucky Rand Paul, que lo calificó de "medida draconiana que ahoga la libertad de expresión, pisotea los derechos constitucionales y perturba las actividades económicas de millones de estadounidenses."
Conclusión
Además de los problemas relacionados con la primera enmienda, una ley de este tipo exasperaría sin duda las tensiones entre China y Estados Unidos y repercutiría en el futuro en tecnologías como los paneles solares, los vehículos eléctricos y los semiconductores.
Hasta ahora, las pruebas de las amenazas a la seguridad nacional de la aplicación han permanecido secretas. Pero según las declaraciones de una representante, Sara Jacobs, las preocupaciones que se escucharon en las sesiones informativas clasificadas antes de que se aprobara el proyecto de ley en la Cámara son "cosas que están ocurriendo en todas las plataformas de medios sociales", no sólo en TikTok. Como resultado, queda por ver qué tipo de precedente sentaría la ley para la industria tecnológica en su conjunto y el impacto que tendría en las libertades de la primera enmienda de las que disfruta el público estadounidense.
