Las marcas verdes se están topando con luces rojas en China. Casi todas las solicitudes de registro de marcas que incluyen la palabra "verde" son rechazadas. Se rumorea que la culpa la tiene la preocupación por el "lavado verde", aunque, dada la opacidad del proceso de solicitud, esto no puede confirmarse.
El lavado verde es la "práctica de hacer afirmaciones injustificadas o exageradas de sostenibilidad o respeto al medio ambiente en un intento de ganar cuota de mercado". El uso de palabras como "verde", "ecológico" y "sostenible" para describir productos que en realidad no son respetuosos con el medio ambiente puede considerarse una forma de lavado verde.
La Ley de Marcas china prohíbe el registro de marcas engañosas. Se puede considerar engañosa una marca que hace un "lavado de cara verde" de los productos subyacentes. Sospechamos que la preocupación por el carácter engañoso está detrás de los numerosos rechazos de marcas ecológicas, y los profesionales chinos comparten estas sospechas.
A diferencia de lo que ocurre en Estados Unidos, la Administración Nacional de la Propiedad Intelectual de China (CNIPA) no publica las notificaciones que emite en relación con determinadas solicitudes de marcas. En cualquier caso, las notificaciones a los solicitantes suelen ser algo escuetas, lo que a menudo les obliga a leer entre líneas. En consecuencia, no es posible confirmar las motivaciones de los rechazos de solicitudes concretas de registro de marcas verdes.
Sabemos que el homólogo estadounidense de la CNIPA, la Oficina de Patentes y Marcas de Estados Unidos (USPTO), está planteando explícitamente problemas de "lavado verde". En el caso de algunas solicitudes de registro de marcas ecológicas, la USPTO ha exigido un descargo de responsabilidad de los términos pertinentes, por motivos de engaño. Desgraciadamente, en China no es posible presentar una renuncia de responsabilidad, lo que significa que lo más probable es que se rechace la solicitud.
Las marcas cuyos productos son de hecho respetuosos con el medio ambiente podrían intentar recurrir el rechazo de las marcas ecológicas presentando pruebas de su buena fe ecológica. En muchos casos, sin embargo, demostrar que se es respetuoso con el planeta puede no ser factible. Además, en general la CNIPA no está muy abierta a argumentos de fondo sobre los motivos de denegación.
Las marcas que aún no se han comprometido con las marcas ecológicas deben considerar nombres que eludan estas cuestiones. En cuanto a las que ya se han comprometido, pueden considerar otros enfoques. Por ejemplo, si quieren entrar en el mercado chino, pueden considerar la posibilidad de utilizar un nombre diferente en China o centrarse en su marca en chino. También pueden intentar registrar los elementos gráficos de sus marcas, como los logotipos.
