A principios de este año, inicié una serie sobre los aspectos básicos de los litigios en Estados Unidos para nuestro público internacional. El sistema judicial estadounidense está basado en leyes y es complicado, por lo que ya hemos tratado con anterioridad cuáles son sus opciones previas al litigio y dónde debe interponer una demanda.
Pero, ¿qué ocurre si usted es el destinatario de una demanda? Aunque el demandante (la persona que presenta la demanda) debe cumplir ciertos requisitos de iniciación de la causa y notificación al demandado (la persona demandada), llegará un momento en que el demandado deba comparecer en la causa judicial. A continuación, desglosaremos las distintas opciones que tiene el demandado para comparecer y responder a la demanda del demandante. Esta es una decisión importante porque establece el tenor general del caso.
Contestación y presentación de demandas reconvencionales
- La respuesta: dependiendo de si se está ante un tribunal federal o estatal (y qué estado importa también), la respuesta más básica es la contestación. Una respuesta debe contener las negaciones necesarias para contrarrestar las alegaciones materiales de la demanda, así como cualquier defensa afirmativa que el demandado quiera hacer valer. La presentación de una respuesta pone el caso "en cuestión" y a menudo inicia el proceso de descubrimiento.
- Las demandas reconvencionales (o la demanda cruzada): si quiere hacer valer sus propias pretensiones de reparación afirmativa contra el demandante (o un codemandado, o incluso alguien que aún no está incluido en la demanda), tendrá que presentar demandas reconvencionales. Por lo general, las demandas deben estar relacionadas con el asunto o la transacción alegados en la demanda (aunque hay varias excepciones).
Atacar la denuncia
A veces, sin embargo, puede decidir que la demanda es deficiente en algún aspecto. Si ese es el caso, hay algunos medios para "atacar" la demanda en una fase muy temprana del pleito. Suelen ser opciones costosas, pero en las circunstancias adecuadas, son muy recomendables para simplificar el caso o incluso eliminarlo por completo.
- La petición de desestimación (o Demurrer): este tipo de petición se utiliza si la denuncia o la demanda es deficiente desde el punto de vista procesal, por ejemplo, si el tribunal carece de competencia en la materia, si el demandante carece de capacidad para demandar o si existe otra demanda pendiente entre las mismas partes por las mismas reclamaciones. También se utiliza para comprobar la "suficiencia jurídica" del alegato. El argumento que se presenta es: "incluso si todos los hechos de la demanda se consideran ciertos, esos hechos son insuficientes para constituir una causa de acción."
- Moción de nulidad: este tipo de moción se utiliza para eliminar literalmente ciertos defectos de la demanda. En este caso, se puede tachar toda la demanda o, a veces, incluso palabras o frases sueltas. Los defectos que pueden eliminarse varían de una jurisdicción a otra; por ejemplo, la norma de California es: (a) materia irrelevante, falsa o impropia, o (b) cualquier cosa no redactada o presentada de conformidad con las leyes del estado.
Hay varias razones por las que la práctica temprana de la moción puede ser útil, o tal vez incluso necesaria, y vale la pena los costes iniciales. Dado que se trata de una decisión estratégica complicada, asegúrese de consultar con abogados litigantes experimentados que puedan guiarle a través de todas sus opciones de precontencioso y litigio.
