¿Debería seguir en China?

¿Debería seguir en China?

La encrucijada de los negocios en China

¿Qué se necesita para tener éxito en una economía de 17 billones de dólares lastrada por la volatilidad geopolítica, el aumento de las barreras normativas y los riesgos sistémicos para la propiedad intelectual? Para las empresas estadounidenses que operan en China, esta pregunta no es teórica, sino estratégica, urgente y de profundas consecuencias.

Algunas empresas consideran que la enorme base de consumidores de China es insustituible. Otras están reduciendo su actividad o abandonándola por completo debido a las leyes de seguridad de los datos, la imprevisibilidad del mercado, las preocupaciones geopolíticas o la creciente presión de las partes interesadas para que reduzcan los riesgos. Pero no se trata de una decisión binaria. Muchas empresas se mueven en un delicado equilibrio entre la oportunidad y la exposición operativa y legal.

Esta guía desglosa las principales razones por las que algunas empresas se quedan, por qué otras se diversifican o salen, y cómo gestionar estratégicamente su presencia, especialmente a través de empresas conjuntas (JV), uno de los modelos de participación más comunes y arriesgados en China.

¿Por qué quedarse en China? Razones para quedarse

A pesar de los vientos en contra geopolíticos, China sigue siendo un motor de crecimiento esencial para muchas empresas estadounidenses. Entre las principales razones figuran:

  • El mercado chino es incomparable: Con la mayor clase media del mundo y un consumo urbano creciente, China sigue siendo un mercado mundial de primer orden para las marcas de electrónica, moda, belleza y alimentación y bebidas.
  • Ecosistemas empresariales muy arraigados: Muchas empresas llevan décadas construyendo redes de proveedores, distribuidores y socios en China que serían difíciles y costosas de sustituir.
  • Talento cualificado: La mano de obra china ofrece unos conocimientos técnicos y de fabricación inigualables en sectores como la electrónica, los vehículos eléctricos y los productos de consumo.
  • Costes de salida prohibitivos: La liquidación de activos, el pago de indemnizaciones, la rescisión de contratos y los controles de divisas a menudo hacen que salir de China sea más perjudicial que quedarse.
  • Falta de alternativas viables: Volver a casa o trasladarse a Vietnam, Tailandia o México no siempre es viable desde el punto de vista tecnológico o económico, especialmente para las empresas que dependen de la avanzada logística y la profundidad de proveedores de China.

Sin embargo, la decisión de quedarse exige algo más que inercia: requiere rigor estratégico y conciencia del riesgo, especialmente en lo que respecta a la propiedad intelectual y la gobernanza de las empresas conjuntas. Véase Por qué AHORA es un buen momento para redoblar los esfuerzos por hacer negocios en China.

¿Por qué abandonar o diversificar? Argumentos a favor de la reducción de riesgos

Por otro lado, los crecientes riesgos han obligado a muchas empresas a reducir su exposición a China o a abandonarla por completo:

  • Aumento de las tensiones geopolíticas: Las disputas comerciales entre Estados Unidos y China, las prohibiciones tecnológicas y las sanciones han hecho impredecible el acceso al mercado.
  • Riesgos persistentes para la PI: Las transferencias forzosas de tecnología, la escasa aplicación de la ley y los competidores imitadores siguen afectando a los sectores con gran peso de la propiedad intelectual. Consulte Las cuatro mejores formas de proteger su PI frente a China.
  • Complejidad normativa: Las leyes chinas sobre seguridad de datos y ciberseguridad cambian las reglas del juego para las empresas extranjeras.
  • Cadenas de suministro frágiles: COVID-19 y los bloqueos regionales mostraron cómo una dependencia excesiva de China puede paralizar las operaciones mundiales.
  • Reputación y presión ESG: El escrutinio público, el activismo de los accionistas y la reacción política en Estados Unidos empujan a las empresas a diversificarse por razones éticas y estratégicas.
  • Aumento de los costes operativos: Los costes laborales y normativos de China han aumentado, anulando a menudo la ventaja de bajo coste que llevó a las empresas allí en primer lugar.

Para muchos, la conclusión es clara: una estrategia "China más uno" o la salida total no sólo es prudente, sino necesaria.

Ejemplos reales: Éxito más allá de los gigantes

Uno de nuestros clientes, una mediana empresa estadounidense de tecnología del entretenimiento, exploró recientemente la posibilidad de crear una empresa conjunta con una empresa china de medios de comunicación para localizar y distribuir su plataforma de entretenimiento patentada. En lugar de transferir tecnología básica o capital, ayudamos a estructurar un acuerdo de distribución de pago por servicio, junto con un estricto acuerdo de licencia de propiedad intelectual y requisitos de seguimiento del uso. Nuestro cliente conservó la propiedad de los activos principales, evitó las responsabilidades operativas chinas y estableció un lucrativo flujo de ingresos, sin ceder el control ni asumir riesgos locales.

Este tipo de acuerdo es cada vez más viable para las PYME que buscan acceder al mercado chino sin exponer sus activos más valiosos. Como continuación de este artículo, publicaré otro sobre las muchas formas en que las empresas pueden vender en China sin necesidad de tener una entidad local o personal sobre el terreno.

Formas inteligentes de permanecer en China sin perder el control

El éxito de nuestro cliente del sector de la tecnología del entretenimiento no fue accidental, sino el resultado de una estructuración estratégica, una cuidadosa gestión del riesgo y un profundo conocimiento del terreno jurídico de China. Hemos observado resultados similares en sectores en los que las empresas pensaron detenidamente cómo se relacionaban con China, no solo si lo hacían o no.

Si decide que permanecer en China es la decisión correcta para su empresa, he aquí los principios clave que debe seguir para minimizar los riesgos y mantener al mismo tiempo el acceso al mercado:

  • Evite las empresas conjuntas de capital cuando sea posible. Una estructura de pago por servicio o licencia puede generar ingresos y mantenerle a usted en control y fuera de las arenas movedizas de la regulación.
  • Sea propietario de su propiedad intelectual o conceda licencias estrictas sobre ella. No transfiera nunca activos tecnológicos o de marca sin condiciones estrictas y un plan de emergencia.
  • Controlar la chuleta. En China, quien tenga el sello de la empresa (chop) puede vincular el negocio. Asegúrate de que eres tú o alguien a quien controlas legalmente.
  • Utilice cláusulas favorables de resolución de conflictos. Cuando sea posible, especifique el arbitraje en una jurisdicción neutral como Singapur o Hong Kong.
  • Sea consciente de la ubicación de sus activos. Sepa dónde residen su propiedad intelectual, su efectivo y sus contratos clave, y qué ordenamiento jurídico los regula.

No es necesario apostarlo todo para ganar en China. Pero si te quedas, estructura tu presencia con el mismo cuidado estratégico que emplearías en cualquier entorno de alto riesgo.

Conclusión: ¿Debe su empresa quedarse en China?

No hay una respuesta única. La decisión de permanecer, abandonar o diversificar debe reflejar su sector, su tolerancia al riesgo y su visión estratégica.

Pregúntatelo a ti mismo:

  • ¿Dispone de una propiedad intelectual única o de ventajas de producto difíciles de reproducir?

  • ¿Puede confiar y verificar a sus socios locales?

  • ¿Está estructurada su operación en China para limitar su exposición legal y financiera?

  • ¿Su cadena de suministro o su base de clientes dependen demasiado de China?

Muchas de las empresas con las que trabajamos están haciendo todo lo posible para seguir obteniendo beneficios de China y, al mismo tiempo, reducir su presencia en el país. Para algunas, eso significa simplificar sus estructuras jurídicas, externalizar más funciones o trasladar la propiedad de activos clave fuera de China.

Nuestros abogados especializados en China realizan evaluacionesperiódicas de los riesgos jurídicos en China -a vecesanuales, a veces trimestrales- para clientes con el objetivo específico de reducir su exposición y mejorar su flexibilidad. Estas auditorías se están convirtiendo cada vez más en una parte esencial de la permanencia en China en sus propios términos.

Si no está seguro, o quiere preparar su estrategia para el futuro, puede que haya llegado el momento de realizar una evaluación personalizada del riesgo en China. Concierte hoy mismo una llamada estratégica confidencial, antes de que el próximo cambio de política ponga en peligro sus operaciones en China.

Consulte nuestros servicios jurídicos sobre China

Seguir leyendo

China Negocios