El Departamento de Control del Cannabis de California (DCC) acaba de publicar unas nuevas directrices para los cultivadores de cannabis tras la aprobación de la ley SB-833. Entre otras cosas, California permitirá a los cultivadores de cannabis reducir el tamaño de su canopia y, por tanto, los costes de la licencia. Esto supondrá un gran beneficio. Escribo mucho sobre los problemas a los que se enfrenta la industria del cannabis en California - a menudo debido a una regulación demasiado onerosa - pero en este caso, creo que las directrices de la DCC tendrán un impacto positivo en ciertos cultivadores de cannabis en el Estado Dorado.
California tiene cerca de un zillón de tipos diferentes de licencias para cultivadores de cannabis. Se basan en el tamaño (cabaña especializada, especialidad, pequeña, mediana y la relativamente nueva grande) y el tipo (interior, exterior o mixto-luz). Y hay licencias separadas para viveros y procesadores (podrías pensar que procesar es fabricar, porque tendría sentido, pero te equivocarías).
Tener más de una docena de tipos diferentes de licencias garantizaba problemas. Uno de esos problemas es que el Estado no creó un mecanismo para cambiar fácilmente de tamaño de licencia. Con la apertura de las grandes licencias en 2023, el Estado hizo posible "subir" de tamaño, pero no bajar. Esto supuso un gran problema para mucha gente del sector.
He aquí un ejemplo: imaginemos que un cultivador obtiene una licencia de interior media (que le permite tener entre 10.001 y 22.000 pies cuadrados de cubierta). En el momento de obtener la licencia, el cultivador tenía suficiente capacidad construida para tener 7.500 pies cuadrados de cubierta, pero esperaba construir otra sala unos meses más tarde. Por la razón que fuera, el cultivador no tenía los medios para completar la construcción y se vio obligado a pagar la tasa media de interior de 77.905 dólares, frente a la tasa pequeña de interior de 35.410 dólares.
Hasta hace poco, la única opción del cultivador sería seguir pagando el doble de la tasa anual de licencia o presentar una solicitud completamente nueva para la licencia más pequeña. Esto podía resultar un proceso engorroso y costoso, aunque con el tiempo supusiera un mayor ahorro de costes.
Según las nuevas directrices de la DCC, los cultivadores de cannabis podrán solicitar una licencia de cultivo de tamaño reducido en el momento de la renovación o si realizan un cambio puntual en su fecha de caducidad fuera del proceso de renovación. Aunque no tenemos muchos datos sobre a cuántos titulares afectará esta medida, esperamos que ayude a los cultivadores de cannabis afectados y reduzca la burocracia normativa.
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