Aunque el sector del cannabis es una de las nuevas industrias más lucrativas de Estados Unidos -se calcula que alcanzará unos 58.000 millones de dólares en ventas en 2028-, los mercados de varios estados recreativos están sufriendo graves perjuicios financieros. En estados como Oregón, los problemas se han descontrolado tanto que las empresas están incluso abandonando el estado. Y estos problemas distan mucho de haber terminado.
California es probablemente el mejor ejemplo de un estado tan problemático, como escribí la semana pasada. El año pasado, los informes del Departamento de Administración de Impuestos y Tasas de California mostraron que las ventas totales de la industria del cannabis de California bajaron un total de más del ocho por ciento de 2021 a 2022, lo que significa aproximadamente 400 millones de dólares menos de ventas anuales en un mercado tan gigantesco como el de California - al menos ese fue el caso con el mercado legal, que California está haciendo poco para proteger. Y según las recientes cifras de ventas para 2023, parece que la pérdida financiera total fue aún más sustancial. Mientras que en 2022 se produjeron casi 5.400 millones de dólares en ventas totales, un total de 250 millones de dólares menos en ventas totales si se compara con el ya problemático año 2022. Desgraciadamente, los problemas de California son sólo un microcosmos de los grandes problemas a los que se enfrentan o se enfrentarán pronto los demás estados.
Oregón no está mucho mejor. Su industria del cannabis ha estado experimentando sus propios problemas financieros significativos. Junto con la caída de los precios al por menor, la industria del cannabis de Oregón ha experimentado un patrón muy similar de dos años consecutivos de disminución de las ventas - al igual que California. Y aunque el mercado de Oregón no es tan amplio como el de California, las pérdidas financieras proporcionales siguen siendo igual de observables.
En realidad, el sector del cannabis de Oregón solo superó los 1.000 millones de dólares en ventas totales anuales una vez, durante el año posterior a la pandemia de 2021. En ese año, las ventas totales de la industria del cannabis en Oregón alcanzaron la asombrosa cifra de 1.200 millones de dólares. Desde entonces, las ventas totales han disminuido de forma continua y notable en todo el estado. En total, los minoristas de cannabis con licencia en Oregón vendieron aproximadamente 944 millones de dólares en productos de cannabis en 2023, un considerable descenso de 39 millones de dólares desde 2022, que ya fue un año de disminución de las ventas totales.
Mientras que los sospechosos habituales están en juego cuando se trata de la continua decadencia de la industria del cannabis de Oregón, tales como sus propios problemas del mercado ilícito a las grandes empresas de cannabis que salen del estado, una decisión entonces progresista tomada durante la infancia de la industria del estado puede ser un culpable importante de los actuales problemas generalizados y luchas que plagan esa misma industria. Mientras que otros estados, como Nevada y Washington, pusieron un límite al número de licencias de cannabis recreativo que se podían asignar, Oregón no aplicó ninguna restricción de este tipo.
Aunque al principio se trataba de una regulación única, la consecuencia fue una sobresaturación del mercado que no se ha visto en casi ningún otro estado de su tamaño. En total, Oregón ha aprobado la asombrosa cifra de 3.000 licencias de cultivo, producción o venta al por menor de cannabis. Para un estado con una población de 4,2 millones de habitantes y una industria turística que no alcanza la magnitud de otros estados de la costa oeste, no debería hacer falta ser licenciado en economía por una escuela de la Ivy League para entender por qué esto causaría problemas importantes. Este feroz desequilibrio entre la oferta y la demanda hizo que los precios al por menor en general disminuyeran a mínimos históricos que tampoco se habían visto en la industria legal de ningún otro estado, con una caída del precio medio de los artículos de 15,01 dólares en febrero de 2023 a 13,93 dólares en febrero de 2024, según el sitio de agregación de datos Headset.io.
Tanto desde el punto de vista de las ventas totales como de la creación de empleo, Oregón ha sufrido enormemente durante el pasado año debido a las numerosas salidas de empresas de alto nivel de la industria estatal, que se encuentra en plena recesión. Esperamos ver aún más salidas, reducciones y reestructuraciones en los próximos meses, ya que las empresas luchan por mantenerse a flote y llegar a fin de mes.
La sobresaturación de la industria del cannabis de Oregón está en el frente de los problemas que el estado y las partes interesadas están tratando de abordar. Se han establecido moratorias a lo largo de los años a partir de 2018 para dejar de asignar más licencias, y la Alianza de la Industria Cannábica de Oregón (CIAO) está solicitando que los legisladores y funcionarios de la Comisión de Licores y Cannabis de Oregón continúen esta moratoria más reciente que expira en abril. El proyecto de ley ya ha sido aprobado por ambas cámaras y la CIAO cree que será firmado por el Gobernador.
Si bien no hay manera de abordar directamente y posiblemente remediar los millones en ingresos anuales totales perdidos, la moratoria de licencias puede proporcionar un remedio pequeño pero seguro a los problemas sustanciales que la industria del cannabis de Oregón ha estado enfrentando continuamente. O al menos podría ser un primer paso. La sobresaturación no es ciertamente el único problema al que se enfrenta la industria del cannabis de Oregón, pero si no se aborda podría ser devastador.
