Pronto podría ser ilegal fumar marihuana en público si algunos políticos de Nueva York se salen con la suya. El asambleísta neoyorquino Michael Novakhov y el senador Mario R. Mattera son copatrocinadores de un nuevo proyecto de ley que prohibiría el consumo público de cannabis a menos que un gobierno local opte por permitirlo. En la actualidad, en cualquier lugar donde se pueda fumar un cigarrillo, se puede fumar un porro. A pesar de lo que se ve, no está permitido fumar en los parques públicos.
El proyecto de ley S7604 del Senado se presentó con el propósito de prohibir el consumo público de cannabis y, en caso de ser sorprendido, el fumador incurriría en una multa de 125 dólares. Entre otras razones, la justificación del proyecto de ley propuesto es evitar que los niños estén expuestos a ver fumar cannabis a una edad temprana o a su olor. Curiosamente, el proyecto de ley cita las molestias del humo de segunda mano y los peligros potenciales para la salud del tabaco, pero ahora pretende diferenciar dónde está permitido fumar. Parece que el gobierno sigue estando de acuerdo con que se fume cigarrillos al aire libre cerca de los niños, pero no el cannabis; o al menos que el gobierno va a por la fruta madura mientras la legislación sobre el cannabis está en pañales.
En pocas palabras, este proyecto de ley significa que antes de fumar en el Estado de Nueva York, el fumador tendría que buscar la legislación específica de cada ciudad, pueblo o condado y saber si está prohibido fumar en público en esa zona, lo que supondría un quebradero de cabeza. Por otra parte, este tipo de proyecto de ley sólo grita "aplicación selectiva" y ¿realmente quieren las autoridades gubernamentales malgastar recursos policiales críticos en multar a la gente con 125 dólares y pedirles que trasladen su hábito de fumar unos cientos de metros a la siguiente ciudad? Además, si se ilegaliza fumar al aire libre, ¿dónde elegirán los fumadores fumar sin miedo a una multa? No se les permite fumar en espacios cerrados y es de suponer que sus contratos de alquiler les impidan fumar en sus apartamentos.
Este proyecto de ley es lamentablemente inadecuado y no aborda la miríada de cuestiones que plantearía. Esperemos que, cuando se presente un proyecto de ley de este tipo al Senado y/o a la Asamblea de Nueva York, se produzca un debate significativo sobre los impactos dispares de dicho proyecto de ley. Si la salud pública y la salud de los niños son tan importantes, ¿por qué limitarse a la marihuana y no a los problemas del olor y el humo de segunda mano del tabaco? Siga atento al Canna Law Blog para conocer más novedades sobre el mercado regulado del cannabis en NuevaYork.
